Cruzada contra el sillón.

El otro día tuve una enorme suerte, tras un día realmente agotador (y al decir agotador, me refiero a muy por encima de lo que puede ser para mi el más agotador de los días) el exceso de actividad física me había dejado ese dolor de músculos, tendones y huesos que no te deja nada más que aplatanarte y quejarte, sabiendo que mientras que no parase no aparecería esa demoledora sensación acepté la invitación de King Julen de dar un paseo y disfruté mucho sacando a un largo paseo Nuko junto con él.

Hacía tiempo que no lo hacíamos, una cosa llevó a la otra, se nos unió la Mini y por último el Gordo Barney. Terminamos a “buena hora” hablando de los hongos y papilomas humanos que se manifiestan fantasmagóricamente en un agradable bar de la zona que otrora fue una de nuestras bases, con una cantidad ingente de cerveza belga entre pecho y espalda. Lo que digo de lo más agradable. Hubo exaltación de la amistad, recuerdos para Reithor*, aunque no llegamos a mentar Asturias (vive Dios).

Al final intentamos seguir de marcha a quemar Umbar, pero el Julen se rajó (que es un hombre de bien que debe dormir sus horas), gracias a un tubo de bisolvón del malo al que llamaba la camarera “Pacharán Casero”** que nos invitó antes de irnos, la mini empezó a abrazar farolas*** (en plan platano con Whisky), así que nos retiramos haciendo el duende, para abrazar cosas más grandes como tazas de wáteres o seres queridos. Quedando así sólo el Gordo, haciendo gala de la incombustibilidad propia de los de su familia.

El caso es que el agradable y comentable incidente me ha hecho pensar que muchas veces preferimos quedarnos a morir en casa como si fueramos abuelos y realmente nos perdemos cosas importantes, asumimos que cumples los 30 y te haces formal, te quedas en tu casita por que “no hay que cometer excesos” y es un gran error, no defiendo el ir a muerte siempre, pero no podemos atocinarnos y fingir que somos más viejos de lo que realmente somos.

Os deseo lo mejor y espero veros hoy en el concierto de ZIA.

* Reithor, Julen quiere que sepas que va a andar sin internet durante mucho tiempo y que no va a poder comunicarse contigo todo lo que quisiera.

** Que conste que lo escribo con “ch” tan sólo en honor al King Julen.

*** Te quiero, pequeñaja.