Mucho tiempo.

Mucho tiempo sin escribir... A estas alturas de la película, quien no se haya enterado es que no ha estado atento. Pero sí, conseguimos extraer todo el mineral del que se hacen los sueños de las insalubres minas de Kessel y como recompensa trabajaré de por vida para la Megacorporación que me lleva puteando los últimos 8 años.

Hace un año mi vida era un puzzle en el que sólo quedaba una pieza por poner... pero parecía que era imposible de terminar. Actualmente sólo esa pieza está puesta. Ha sido doloroso, me he complicado la vida y me la han complicado, ha costado mucho, pero lo importante es el presente. Lo importante es que l@s amig@s que han estado conmigo y me han apoyado y seguido con un riguroso respeto, a veces en la distancia y a veces a pie de calle, ahora es el momento de que lo celebren conmigo, como sólo las personas que están unidas en los vínculos que se forjan con el tiempo pueden hacerlo.

Es el momento de tirar lo viejo para hacer espacio para lo nuevo, de mirar hacia dentro y pensar cómo quiero decorar mi vida a partir de ahora. Espero que podáis disfrutar este proceso conmigo.

Un beso a todos y mil más...